Importancia de la Cadena de Frío

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¿Sabías que la zona de temperatura de 4 a 60ºC/40ºF a 140ºF es considerada como la zona de temperatura peligrosa, debido a que en este rango las bacterias se reproducen rápidamente?

Es necesario saber que las bajas temperaturas (menores a 4ºC/40ºF) no matan bacterias, como sí lo hacen las altas temperaturas (mayores a 60ºC/140ºF), las temperaturas de refrigeración (4ºC a 1ºC/40ºF a 33ºF) hacen más lento el metabolismo de los microorganismos y las temperaturas de congelación (-18ºC/0ºF) hacen que el metabolismo de los microorganismos se detenga, por lo tanto, si los productos alimentarios que requieren refrigeración son expuestos a temperaturas de 4ºC a 60ºC, los microorganismos que estaban dormidos o funcionando lentamente  estarán ahora en su zona de crecimiento óptimo, lo que les permitirá reproducirse rápidamente, luego al comer una persona ese alimento puede enfermarse, intoxicarse e incluso morir, por esto la importancia de mantener la cadena de frío a lo largo de toda la cadena de distribución del producto.

¿Pero, qué es la Cadena de Frío?

La Cadena de Frío es el manejo controlado de las temperaturas de los productos perecederos, desde el momento en que son producidos, a través de toda la cadena de distribución hasta llegar al consumidor final, manteniendo la calidad e inocuidad de los mismos.

Es importante señalar que si un producto requiere temperatura de refrigeración y otro producto requiere temperatura de congelación, cada uno debe distribuirse y mantenerse a la temperatura adecuada. También hay que tener otro factor en cuenta: la temperatura de congelación del agua no es la misma que la de otros productos.

Ahora, ¿Por qué al refrigerar algunos productos, como las frutas y vegetales, tienden a perder la calidad?.

En ocasiones al refrigerar los vegetales y las frutas se producen manchas, arrugamiento y grietas en la superficie, esto es porque en temperaturas de refrigeración se siguen desarrollando los microorganismos sólo que más lento. Sin embargo, todo esto se puede evitar tomando algunas medidas en cuenta: temperatura adecuada, protegiendo los alimentos con bolsas, empaques o embalajes, conociendo el tipo del producto (flores, frutas, vegetales), considerando su vida útil y controlando la humedad. Recordemos que la refrigeración se aplica para mantener los alimentos a corto o mediano plazo, desde días hasta semanas y la congelación para mantener alimentos a largo plazo, desde semanas hasta meses.

Si no se mantiene de manera adecuada el producto durante toda la Cadena de Frío, se corre el riesgo de que sufra cambios negativos en sus atributos, aumente la pérdidas por mermas e incluso que se produzcan afectaciones en la salud de los consumidores.